Entre vigilias e insomnios
miércoles, 19 de noviembre de 2014
Dios del sexo
Cada vez que me desnudo para dejar entrar un cuerpo en el mío,
me pongo de rodillas, cierro los ojos y pido un milagro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario